Somos conscientes del fenómeno de la interconexión a través de la internet, la misma que permite que las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (TICs) avancen a un ritmo vertiginoso, trayéndonos consigo novedosos métodos de enseñanza y procesos de aprendizaje que repercuten directamente en los sectores en donde desarrollamos nuestros proyectos de innovación tecnológica.
Las TICs hacen referencia al conjunto de herramientas relacionadas con la transmisión, procesamiento y almacenamiento digitalizado de grandes cantidades de información que se caracterizan por ser contenidos multiplataforma, emitidos tanto por medios tradicionales como la televisión y la radio, y convergentes como los periódicos digitales. Desarrollan su actividad en el empleo de la informática para transformar, gestionar, proteger, difundir y localizar los datos necesarios de cualquier actividad humana, lo que supone ventajas empresariales, en cualquier tipo de sector económico.
El uso de las TICs es un referente muy importante para medir el nivel de desarrollo de un país a y para entablar relaciones humanas. Dada su doble naturaleza, las TICs pueden clasificarse de acuerdo con el uso que se le dé, utilizando como un medio de información y/o de entretenimiento. En cualquier caso, es tarea de los usuarios ofrecer y buscar contenidos de calidad, ya que son ellos mismos quienes establecen y demandan el tipo de contenido que desean.
A partir de este postulado, es que se habla de la implicación de las nuevas tecnologías dentro de la construcción social, y del nuevo paradigma de relación-comunicación, que supone migrar nuestra necesidad de búsqueda de información a entornos digitales. La audiencia debe ser formada de una manera creativa, para que demanden contenidos de calidad. En base a esta coyuntura, las empresas utilizan el e-learning como un sistema de formación multitemática que se realiza a través de internet y/o conectados a la red. Este tipo de formación representa una oportunidad para difundir el uso de las TICs entre sus trabajadores y proporcionarles un espacio para estimular el aprendizaje continuo y la gestión del conocimiento de la empresa entre los diversos equipos que le conforman.
Entre las ventajas de utilizar el e-learning se encuentran la reducción del coste de la formación, inmediatez y flexibilidad. Además, es importante mencionar que fomentan la autoformación y evita la dependencia directa del usuario con respecto al docente, se fomenta el trabajo en equipo, y la utilización de herramientas audiovisuales, necesarias para divulgar la información en los canales digitales que podemos encontrar en la actualidad. Las TICs proporcionan la individualización de la enseñanza donde cada uno puede utilizar los materiales más acordes con él y su ritmo personal ayudando que, por ejemplo, el usuario pueda autoevaluar sus conocimientos a la vez que tiene un contacto mayor con el tutor a cargo. La flexibilidad de horarios y la desaparición de barreras geográficas son algunas de las mayores ventajas del e-learning.
Las nuevas tecnologías aportan a los profesionales de la educación, múltiples recursos para la formación, además, permiten que el trabajador siga formándose mediante cursos on-line y otras informaciones que puedan contribuir a mejorar sus aptitudes profesionales. En Ad Maiorem contamos con una cultura que se basa en la proyección e innovación tecnológica, por medio de la que consolidamos proyectos sostenibles en un entorno de constante cambio. Por esta razón, nuestras políticas de formación aseguran que nuestro equipo participe de continuos procesos de entrenamiento en hard & soft skills, ideales para canalizar y dirigir sus experiencias y conocimientos para fortalecer las relaciones personales dentro de nuestro equipo de trabajo.
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