Desde nuestra experiencia, en Ad Maiorem, hemos visto la importancia que ha significado fortalecer nuestro liderazgo, convirtiéndolo en una pieza fundamental de nuestra cultura de empresa y en una de nuestras principales palancas para lograr el éxito en cada uno de nuestros proyectos de innovación tecnológica. Somos conscientes de que el trabajo en equipo funciona, y que el rendimiento de este será bueno si dicho equipo consigue los resultados para los que fue creado y diseñado.
En este sentido, cuando nos embarcamos en un nuevo proyecto, nuestra visión de este se solidifica en cuatro variables que compartimos entre todo el equipo que conforma nuestra empresa: consecución de objetivos, realización de tareas, gestión de funciones y desempeño de roles. Nuestro objetivo transversal es alinear estas variables entre sí, además de interiorizarlas, con el fin de generar una actitud positiva ante el nuevo proyecto y la empatía por cada una de las personas que conforman nuestra estructura corporativa.
Hacer de nuestro equipo un factor multidisciplinario, aportará al grado de diferenciación con el que se perciban las actividades y proyectos que realizamos. Esto es, contar con diferencies personalidades, conocimientos, habilidades y destrezas para las diferentes tareas, funciones y roles que se suelen llevar a cabo; es necesario en muchos casos tener a personas con distintas maneras de ver la vida y enfocar su trabajo. Para sacar lo mejor de cada persona, deberemos de identificar las tareas que mejor saben hacer y ser conscientes de que sus carencias estén contrarrestadas con las fortalezas de otros compañeros. De esta forma nuestro equipo se enriquece y se complementan para funcionar correctamente, logrando entregar siempre los mejores resultados y cumpliendo de la mejor forma los objetivos previamente definidos.
En este punto, a partir de nuestras cuatro variables, se gestan cinco tips que realizamos y controlamos en pro del éxito de nuestros propósitos:
1. Objetivos claros, consensuados y reales:
Nuestro equipo, sabe a dónde apuntamos, y cuales son las tareas y funciones que deben de realizar de cara a conseguir los resultados planteados. Medimos y analizamos nuestro comportamiento grupal, de cara a tener la seguridad de que las acciones que estamos realizando y las decisiones que estamos tomando son correctas para alcanzar el éxito de nuestros proyectos.
2. Claridad de los roles a funciones a desempeñar:
Velamos porque todos nuestros colaboradores tengan claro los objetivos que perseguimos, e invitamos a cada integrante a asumir un rol específico dentro de muestra organización, en donde esperamos que cada uno aporte valor al proyecto desde su especialización.
3. Nuestros procesos están bien definidos:
Mientras más claros sean nuestros procesos, nos aseguramos en mayor medida de que conseguiremos las metas que nos hemos trazado. Esto implica rapidez en el aprendizaje y baja resistencia al cambio. Si nuestro equipo conoce los procesos, es un equipo con un alto grado de productividad.
4. Buena comunicación y clima laboral:
Hemos logrado definir nuestra manera de comunicarnos. Difundimos la práctica de un intercambio de comunicación rápida y ágil, que facilite la toma de decisiones y el aprovechamiento del factor de oportunidad. Adoptamos este tipo de comunicación, por el hecho de ser un mecanismo importante tanto entre trabajadores, con la dirección e incluso externamente.
5. Productividad por medio del trabajo en equipo:
Fomentamos el compromiso individual de cada una de nuestras personas, con el fin de fortalecer la visión global de nuestras actividades. El sentimiento de pertenencia, de ser valorado como una pieza clave del equipo e ir por un mismo objetivo, hacen que nuestros trabajadores estén más motivados, más contentos y, por lo tanto, más eficientes. Con más de una década de experiencia y un equipo humano de más de 100 profesionales, damos soluciones a los proyectos más grandes de innovación tecnológica a nivel mundial, atendiendo a los sectores Aeroespacial, Defensa, Ferroviario, Industrial, Telecomunicaciones y Oil&Gas. Realizamos proyectos en 10 países, atendiendo a nuestros clientes a través de nuestras tres sedes en Europa: Madrid, Milán y Amsterdam. No te quedes fuera, únete a nuestro equipo de alto rendimiento tecnológico.
Ad Maiorem Consulting
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